Hacen falta muchos cambios, pero en este caso me centrare en
el de la contratación de personal por parte de pequeños negocios que a causa de
la excesiva competitividad atraviesan momentos muy difíciles.
Un punto muy importante es el de la contratación, hace falta
un estimulo, y este vendría de la mano de la independencia entre el asalariado
y el empleador, una figura muy interesante seria la del autónomo asalariado
dentro de la micro-empresa, este no tendría
que hacer declaraciones trimestrales, tan solo en base a su jornal le sería
aplicada la respectiva retención del irpf.
Bien este punto permitiría la independencia de ambos, la
movilidad, la implicación por intereses
mutuos sin ataduras ficticias, sin miedos al día de mañana, el trabajo tiene en
la actualidad demasiados altibajos que no permiten el compromiso por ninguna
parte.
No entiendo cómo es posible que en el siglo 21 no existan
este tipo de contratos, el ser autónomo no debería implicar la apertura de un
negocio y la consiguiente entrada en un tipo especifico de régimen fiscal, sería como un asalariado mas pero que no
quiere pertenecer a una empresa concreta, estará en ella mientras le interese,
al día siguiente con su seguridad social en orden puede ofrecer sus servicios a
cualquier autónomo o empresa.
Si ya sé que en la actualidad hay autónomos que ofrecen sus
servicios a empresas, pero no es lo que yo propongo, están los falsos autónomos o los autónomos económicamente
dependientes, ambos casos sujetos a
multitud de supuestos en los que al
final tan solo se riza el rizo.
El miedo de la sociedad Española, el excesivo proteccionismo
del empleo, nos ha conducido a un camino sin salida, de no retorno, al final por
desgracia ese miedo les impedirá a los políticos hacer políticas valientes
capaces de volver a generar empleo, saludos.